Oración a San José obrero el Santo de los Trabajadores
En esta ocasión vamos a ver una Oración de los trabajadores a San José obrero. Esta oración sirve para pedir su intercesión para conservar el empleo
Reza y pide la intercesión de San José por tu trabajo
oracion de san jose obrero para el trabajo
Glorioso San José, modelo de todos los que se dedican al trabajo, obteniéndonos del Creador del universo la gracia de trabajar con conciencia, cumpliendo con fidelidad nuestro deber de trabajar con reconocimiento y alegría, juzgando un honor emplear y desarrollar, por el trabajo, las cualidades recibidas de Dios como un llamado divino para colaborar en la obra de la creación y perfeccionamiento de este mundo.
La gracia de trabajar con orden, paz, moderación, paciencia y eficiencia, sin nunca retroceder ante el cansancio y las dificultades; de trabajar en espíritu de penitencia para expiar nuestros pecados; de trabajar, sobre todo, con desapego y dedicación por los que dependen de nuestro esfuerzo.
Pedimos vuestra intercesión por el mundo del trabajo, a fin de que allí reine el espíritu cristiano de justicia y paz, conforme a las enseñanzas de la Iglesia; que los trabajadores se unan en organizaciones que defiendan sus derechos y respeten a los ajenos; que patrones y empleados se traten mutuamente como hermanos e hijos del mismo Padre, que se conviertan los que ignoran la dignidad de la persona humana y explotan al obrero y al pobre.
Con vosotros, San José, agradecemos a Dios la salud, la fuerza, la disposición y las habilidades que nos permiten proveer el sustento de nuestros familiares y ser miembros útiles de la sociedad. ¡Todo para Jesús, todo por María, todo a vuestra imitación, oh patriarca San José! Tal será nuestra inspiración en la vida y en la muerte.
Amén.
Oración a San José por los obreros
Oh San José, Patrono de la Iglesia, tú que, cerca del Verbo Encarnado, has trabajado todos los días para ganar el pan, extrayendo de él la fuerza para vivir y trabajar; Ustedes que han experimentado la angustia del futuro, la amargura de la pobreza, la precariedad del trabajo, ustedes que brillan el ejemplo de su persona, humildes ante los hombres, pero muy grandes ante Dios, miren a la inmensa familia que se te ha confiado Bendice a la Iglesia. Apóyala cada vez más en el camino de la fidelidad del Evangelio.
Protege a los trabajadores en su dura vida cotidiana, evitando que caigan en desaliento, revueltas negativas, como en las tentaciones del placer.
Ore por los pobres, que continúan en la tierra la pobreza de Cristo, elevando continuamente en su favor la ayuda providencial de sus hermanos más brillantes.
Y mantener la paz en el mundo, esa paz que solo puede garantizar el desarrollo de los pueblos y el pleno desarrollo de las esperanzas humanas. Por el bien de la humanidad, por la misión de la Iglesia, por la gloria de la Santísima Trinidad. Amén
